La aventura más refrescante: Río Cangrejal y Laguna de Cacao
Primero que todo quiero explicarles de lo que se trata La Aventura más Refescante, y es que es una campaña de Coors Light, donde se rifan viajes de aventura
ICONOS Mag
Texto Mauricio Ferreira
14 febrero, 2019
Primero que todo quiero explicarles de lo que se trata La Aventura más Refescante, y es que es una campaña de Coors Light, donde se rifan viajes de aventura con la famosa blogger de viajes Maria José Martínez @deltimboaltambo, Jen Pineda de Roatán @jen_pinedhn, y mi persona @viajesdeuncatracho. El primer viaje fue al Río Cangrejal y a la Laguna de Cacao, ambos lugares cerca de La Ceiba.
Llegamos al hotel para ser recibidos con varios regalos, la agenda completa del viaje, y por supuesto con cervecitas Coors Light bien heladas.
Después de explorar el lugar y descansar un rato en las habitaciones, el restaurante del hotel nos esperaba con un delicioso almuerzo, necesitábamos alimentarnos bien ya que teníamos una tarde llena de aventuras.
Explorando la zona Vista del hotel desde el río
Bien comidos y descansados nos dirigimos a la Laguna de Cacao, uno de los lugares más bonitos que he conocido en Honduras ya que está lleno de vegetación y los paisajes son espectaculares, es una laguna que termina en el mar.
La aventura comenzó subiéndonos a kayaks y cruzando manglares hasta llegar al laguna.
Es difícil explicar la belleza de aquel lugar rodeado de tanta naturaleza. La laguna, los manglares, y el mar, hacen un contraste perfecto, además que los colores del atardecer jugaron un gran papel para terminar de mejorar el paisaje.
El viaje en Kayaks fue cansado, por lo a cenar y un par de Coors para cerrar un gran primer día de La Aventura Más Refrescante.
La aventura comienza cruzando los manglares en kayaks Explorando la Laguna de Cacao en kayaks Los manglares de la laguna son impresionantes Atardeciendo sobre la Laguna de Cacao y sus manglares
El segundo día tocó arrancar temprano, pero con una vista espectacular de la montaña de Pico Bonito y la Catarata El Bejuco, y con un buen café y desayuno de campeones como se debe.
Esa mañana exploramos un poco el Río Cangrejal y sin irnos tan lejos encontramos unas piscinas naturales que se han formado entre piedras gigantes, de más de 20 metros de altura. Yo, por supuesto tenía que saltar en esas pozas de agua cristalina, sin saber que más adelante también iba a estar saltando desde esa misma piedra de 20 metros pero hacia abajo.
La Catarata El Bejuco se podía ver desde mi habitación Rodeado de vida; agradecido por tanto Piscinas naturales que se forman entre las gigantes piedras ¡Claro que tuve que saltar en estas aguas cristalinas!
Después de una mañana de exploración, nos llevaron a hacer Zip Line Canopy sobre las aguas del río, pero también entre la jungla de una de las montañas de Pico Bonito, pudiendo apreciar la densa vegetación de la zona. Hasta conocimos un árbol que se utiliza para hacer goma, la experiencia fue increíble.
En la tarde fue la mejor parte, nos llevaron río arriba, donde nos esperaban unas balsas para bajar los rápidos en White Water Rafting, un deporte extremo, pero súper divertido, que vale la pena probar. Los guías son muy profesionales y te explican bien todos los detalles además que utilizan equipo de calidad, por lo que toda la aventura fue de lo mejor, definitivamente refrescante.
White Water Rafting, una gran experiencia en El Cangrejal Risas en el divertido tour de White Water Rafting
Terminamos el tour de rafting justo frente al hotel, en una pequeña playa donde Coors Light nos tenía preparada una fogata para recibir el atardecer y relajarnos con unas cervecitas frías, bien merecidas después de un día tan largo lleno de actividades, la mejor manera de finalizar el segundo día.
Buena sorpresa nos tenía el Equipo de Coors Light Fogata y Coors Light fría, la mejor forma de relajarse despues de hacer Rafting Una inesperada relajante fogata nos esperaba para terminar nuestro día de aventura
El tercer y último día fue tranquilo, desayunamos tarde ya que estábamos cansados de los días anteriores, pero de igual forma disfrutamos de las instalaciones del hotel y del hermoso Río Cangrejal y de sus aguas, en las cuales terminamos pasando el resto de la mañana hasta que llegó el momento de despedirnos, agradeciendo a todo el equipo que trabajó duro para que saliera cada detalle a la perfección. Gracias Coors Light, hasta la próxima aventura.
