Tulum y la sorpresiva Riviera Maya de México

Con la excusa de celebrar un cumpleaños, cinco amigos decidimos viajar y reunirnos en Tulum, México, sin saber el destino tan espectacular que nos esperaba.

Tulum es una ciudad en pleno desarrollo turístico, que se encuentra al sur de Cancún y Playa del Carmen, a una hora y media en carro, aproximadamente. El aeropuerto más cercano es el de Cancún, desde donde fácilmente se encuentran taxis o buses privados que hacen viajes durante todo el día, en nuestro caso llegamos de noche y cansados.

La mañana siguiente fue de revista, preparamos desayuno y lo montamos frente a la playa, fue uno de esos momentos cuando querés que el tiempo se detenga, fue bien especial.

Después del relajado desayuno era hora de ir a explorar Tulum, y a tan solo 10 minutos caminando teníamos el Casa Cenote, por lo que nuestro primer plan fue ir a nadar en sus aguas cristalinas.

Por la tarde fuimos a conocer el espectacular hotel Azulik Tulum, un lugar único en todas sus formas, súper ecológico y con las mejores vistas de la jungla y el mar de la Riviera Maya. Haciendo reservación con tiempo, se puede disfrutar de una elegante cena en uno de sus “nidos” y apreciar el increíble atardecer.

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Nuestro plan para cenar fue en Papaya Playa Project, justo al lado de Azulik, otro lugar con un encanto peculiar por su diseño y ambiente, sin mencionar su deliciosa comida, lo mejor de viajar es comer!

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Al día siguiente fuimos a conocer las famosas ruinas de Tulum, el más grande atractivo de la zona ya que están ubicadas en un acantilado y sobre una de las playas más bellas de la Riviera Maya.

Las ruinas no son muy grandes, pero las vistas de la playa son las mejores y te ofrecen viajes en lancha para ver los monumentos desde el mar y hasta podés hacer un poco de snorkeling, totalmente recomendado.

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Después de un largo día de explorar, terminamos la tarde en Habitas Tulum, un hotel y restaurante con las mejores vibras, música house en vivo, platillos exquisitos, y un mar y playa incréible, definitivamente otro lugar único y especial.

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Amaneció un nuevo día y decidimos quedarnos y disfrutar de la casa que habíamos rentado, habíamos ido al super y teníamos buena comida para preparar algo rico, fue un buen plan para relajarnos y prepararnos para la noche.

Había olvidado mencionar que en Tulum, en los primeros días de Enero, se desarrolla SOUND, un festival lleno de fiestas durante dos semanas, así que teníamos plan para ir a sus últimos dos eventos: Epic y Shadows, dos fiestas en una en un bosque, donde pudimos bailar durante toda la noche con famosos DJs como los Martinez Brothers, Art Department y Tale of Us, la pasamos súper bien recordando que estamos jóvenes!

Llegó nuestro último día en Tulum, definitivamente muy poco tiempo para explorar y disfrutar de todo su encanto.

Para que no nos contaran fuimos a conocer Casa Malca, una antigua casa de Pablo Escobar, que fue ronavada y convertida en hotel, un lugar ideal para tomarse buenas fotos por todos sus detalles.

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El peculiar Hotel Be Tulum fue nuestro siguiente destino ya que teníamos mesa apartada para comer algo, nos recibieron con la mejor atención y el mejor ambiente, además de poder disfrutar de sus instalaciones en medio de la naturaleza y espacios únicos, la mejor opción para comer algo y tomarse un par de cocteles de mezcal.

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Para despedirnos de Tulum visitamos esa noche Nômade Tulum, donde tenían ese ambientazo que te hace dudar si es buena idea irse al día siguiente, pero teníamos que continuar nuestra ruta por la Riviera Maya, todavía teníamos cosas por hacer.

Lastimosamente llegó el día de partir y abandonar nuestra casa en Tulum, triste porque ya le teníamos cariño. El viaje hasta Cancún es un poco largo por lo que, y como teníamos tiempo suficiente, paramos en Playa del Carmen para almorzar, explorar un rato, y comprar algunos recuerdos.

Llegamos a Cancún y nos recibieron con una incríble cena mexicana, con show de mariachis y danza folklórica, una experiencia difícil de olvidar.

Para el día siguiente Hossanna Travel, mi agencia favorita en Honduras, nos tenía un paquete completo preparado para ir a disfrutar de XplorPark, un parque de diversiones en plena naturaleza, con infinidad de actividades de aventura y adrenalina, el lugar perfecto para terminar nuestras vacaciones.

Desde Zip Line Canopies que te lanzan desde más alto que los árboles, y caer en las aguas frescas de un río, hasta manejar carros anfibios dentro de cuevas y ríos subterráneos, sin olvidar el Hamacuatizaje o Hammock Splash, una actividad extrema en hamacas individuales. Xplor sin duda nos mantuvo bien entretenidos durante todo el día.

Cabe mencionar que la entrada al parque incluye comida y bebidas (sin alcohol) ilimitadas.

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En conclusión, Tulum, y toda la Riviera Maya, tienen una energía especial, convirtiéndose en uno de los mejores destinos para visitar éste 2019, muchos la llaman la nueva Ibiza, ¡yo sí lo creo!