Fallece el médico Enrique Octavio Samayoa, ex ministro de salud de Honduras
Hace unos días el reconocido galeno fue ingresado de emergencia por complicaciones con la Covid-19 a un centro asistencial privado de San Pedro Sula donde lastimosamente falleció
ICONOS Mag
Texto Helen Ventura
8 marzo, 2021
SAN PEDRO SULA. El doctor Enrique Octavio Samayoa ya descansa en la presencia de Dios.
La noticia de su muerte ha conmocionado al gremio médico de Honduras y a la sociedad en general.
Su esposa Thelma llora su partida al igual que sus hijos José Enrique, Roberto, Octavio, Carlos, Claudia, Thelma e Iris.
Hace unos días el galeno fue ingresado de emergencia por complicaciones con la Covid-19 a un centro asistencial privado de San Pedro Sula donde lastimosamente falleció.
El querido doctor Enrique Octavio Samayoa Moncada será recordado por su excepcional labor como médico.
A lo largo de los años desempeñó importantes cargos, uno de ellos fue su ocupación como ministro de salud en el gobierno de Carlos Roberto Reina.
Fue decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH, así como un reconocido docente.
Entre otras de sus muchas ocupaciones también se encuentra el cargo presidencial del Colegio Médico de Honduras donde el doctor Enrique Samayoa demostró sus más extraordinarios valores profesionales.
«Nuestro querido Tío Quique fue un bello regalo del cielo, no solo para la familia, sino también para muchas otras personas a las cuales él hacía sentir como familia. Que en paz descanse nuestro adorado Tío Quique».
Belinda Samayoa / Facebook
Un hombre de familia
El caballero Enrique Samayoa fue uno de los 4 hijos de la dama Petrona Moncada Irias, a la que el ahora recordado médico siempre llamaba «mi heroína»
El querido Tío Quique, como lo llamaban sus sobrinos, fue un hombre dedicado a su familia.
Durante sus años de juventud conoció a su amada Thelma «la muñequita linda de cabellos de oro».
Sus hijos son el mayor ejemplo de su intachable reputación. Junto a su esposa formaron a jóvenes con los principios básicos de su educación y sus valores morales.
En 1959 egresó de la facultad de Medicina de la UNAH y ese año solo fue el inicio de una trayectoria de excelencia en el gremio.
«Tío Quique su recuerdo será imborrable y su ejemplo eternal, más para mí que conocí junto a mi primo Paco de sus desvelos de estudiante de Medicina y que me correteaba cuando hacia calvarear a mi abuela. Gracias Señor por habérnoslo prestado en los años robustos y dejarnos la unción del consuelo. Lo voy a extrañar Tío».
HSam R / Facebook
