
#CuandoUnPadreMuere Miguel Canahuati Canahuati, amado por todos
Su esencia jovial y sincera, hizo que los sampedranos lo respetaran y quisieran como si fuese un padre
ICONOS Mag
Texto Sabino Gámez
19 marzo, 2025
San Pedro Sula. A inicios de enero 2025, la sociedad sampedrana recibió la triste noticia del adiós del querido Miguel Felipe Canahuati Canahuati, cariñosamente famoso como Miguelito Canahuati.

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Este padre de dos hijas: Maria Alexandra Canahuati Canahuati de Vogelsang y Giselle Canahuati Canahuati de Cagli, quienes lo recuerdan siempre porque fue un modelo a seguir y por eso lo honran.
Miguelito Canahuati fue amoroso, incondicional como amigo, humilde, muy enérgico y trabajador y con un gran sentido del humor. Siempre bromeaba con la gente.
Como esposo, extraordinario con la dama Carmen Elena Canahuati de Canahuati, con quien fue incondicional compañero y con amor la llamaba La nena.


Sus hijas recuerdan que a pesar de sus grandes compromisos laborales y deportivos, siempre estuvo disponible y presente y que al convertirse en abuelo de Alexandra y Mariana Vogelsang y Sabina Cagli, fue más juguetón y amoroso que nunca.
«A nivel personal, Miguel Canahuati nos dejó el legado del don del servicio. Fue una persona que siempre pensó en los demás antes de pensar en él. Esto, aunado a su gran carisma, lo hacían una persona especial, encantadora y muy querida por la gente«, recuerda su hija María Alexandra.
Además, fue un ejemplo en el deporte. Era un apasionado del basquetbol y entrenaba al menos tres horas diarias.
De hecho, fue nombrado como el mejor basquetbolista de Honduras por su su gancho para encestar, ya que era famoso y espectacular.

Tenía hábitos sanos que lo hicieron un gran deportista y por ello fue seleccionado nacional, regalando triunfos al país.
En cuanto al fútbol con su amado club deportivo Real España, trabajó a largo plazo para crear generaciones de jugadores. De hecho, fue parte de la hazaña de llevar a Honduras a su primer mundial en España 1982.
«Real España sentó las bases con él y Chelato Uclés para que los semilleros produjeran grandes jugadores. El equipo era todo para él. Era su familia y el fútbol, su cotidiano. Respiraba, comía y dormía fútbol«, recuerda.
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La amistad, la honestidad, la lealtad y el servicio a los más desprotegidos eran cualidades natas del inolvidable Miguel Felipe Canahuati Canahuati.
Sus hijas recuerdan que siempre les decía que en la vida valen mucho las amistades, que todo el dinero del mundo y que «puedes llegar más lejos por quien conoces que por el dinero que hagas«.
De su amado padre, admiraron su capacidad para relacionarse con la gente y que cuando salían a la calle, las personas lo detenía para saludarlo.
«Admiré siempre su gran capacidad para manejar la difícil prensa deportiva. No había alguien que no lo estimara. Inclusive recibía elogios del polémico y famoso cronista deportivo Diógenes Cruz. Fue un gran diplomático en este sentido«, afirma.

Miguel Felipe Canahuati Canahuati hizo mucho en vida. Era hijo de los inolvidables Emilia y Felipe Canahuati, quienes lo educaron con valores arraigados desde que nació el 22 junio 1935.
Su secundaria fue en el instituto San Miguel de Tegucigalpa y con los años, se graduó en administración de empresas en la Universidad de Mississippi, Estados Unidos.
Su primer trabajo fue en muebles Contessa, empresa que fundó con su padre. Muchas residencias de San Pedro Sula aún conservan los muebles de esta marca porque el slogan era Calidad y belleza.
Fue gerente general de Yude Canahuati y gerente general de Cementos de Honduras.
Además, presidente de Liga Nacional de Fútbol, presidente del club deportivo Real España, vicepresidente de la Federación Nacional de Fútbol Fenafuth y presidente del Instituto Municipal de Deportes Inmude.
Miguel Felipe Canahuati Canahuati fue un padre modelo. Siempre fue amado por la gente, admirado por sus amigos y respetado por una sociedad que cada día pierde líderes natos como él.





