Renovarse o morir

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Parece mentira, pero existen mujeres que comienzan a preocuparse por la vejez cuando llegan a cumplir 40 años de edad.

Yo las comprendo, porque todas llegamos a ese punto de la vida, sin embargo; les puedo garantizar que los 40 es la mejor época, y no digamos los 50.

Es ahí, en ese momento de crisis, cuando todas debemos hacernos un auto exámen para saber quiénes somos, que hemos logrado y a que aspiramos en la vida.[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][thb_image image=»13231″][vc_column_text]

Para toda mujer, los años 40, y mucho más los 50; son motivo de preocupación. Foto Pexels-Bruce Mars

[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][vc_column_text]Para mi hay dos caminos: Renovarse o Morir.

Yo decidí renovarme…. Recuerdo que cuando supe de la infidelidad de mi ex esposo, busqué consejería, porque lo que menos deseaba era romper con el matrimonio.

Mi terapeuta me dijo “es su decisión, pero esta es la oportunidad de renovarse, vivir su felicidad, ser lo que nunca ha sido y disfrutar de las cosas que más le gustan¨.

Suena como de  locos, pero eso hice. Renuncié a mi trabajo en la televisión, vendí todas las cosas de mi casa y la alquilé, llené una maleta de ropa y me vine a los Estados Unidos con mi pasaporte americano para empezar una nueva vida.[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][thb_image image=»13232″][vc_column_text]

La infidelidad en el matrimonio, siempre trae desolación y muchos cuestionamientos, principalmente; en uno como mujer para encontrar la clave de ¿en qué fallamos?. Foto Pexels-Leah Kelley

[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][vc_column_text]Me instalé en casa de una amiga, comencé a escribir mi libro, disfrute del sol y del mar sin horario, conocí al hombre soñado, me case y soy feliz.

Ese proceso no fue de la noche a la mañana, ni tan armonioso y sencillo como suena. Los cambios traen consigo sufrimiento, temores, incertidumbre, pero se llega a ver la luz al final del túnel.

Hace una semana, una señora joven de 37 años de edad me envió un mensaje. Solicitaba de mí una orientación sobre su caso en particular:  Casada desde hace 17 años, con tres hijos, un esposo celoso e indiferente y desilusionada consigo misma por no haber podido realizar sus sueños profesionales.[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][thb_image image=»13233″][vc_column_text]

Las mujeres relativamente jóvenes y que se enfrentan a problemas matrimoniales, siempre terminan frustradas, por haberse enfocado en el esposo y la familia, dejando a un lado el éxito profesional. Foto Pexels-Austin Guevara

[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][vc_column_text]Yo le aconsejé bajar unas libritas, cambiar de look, renovar su vestuario y sonreír todo el tiempo, aunque se sintiera triste.

A ella la percibí en ese punto de renovarse o morir.

Las que deciden “morir”, son las que descuidan su apariencia física, las que sufren en silencio el desprecio y las infidelidades del esposo y las que se conforman con las migajas que les da la vida.

A los 40 y a los 50 no hay que temerle. El problema está en nosotras mismas que aceptamos cabizbaja las consecuencias de nuestro silencio y actitud pasiva ante la problemática del diario vivir.

Si usted está en ese punto de Renovarse o Morir dígase a sí misma: Me amo a mi misma, se decir no cuando lo considero y soy consciente de mis virtudes y mis defectos.

Buena suerte a todas……[/vc_column_text][thb_gap height=»30″][/vc_column][/vc_row]